100 FUERA DE LA MONTAÑA, LEJOS DE MADRE
Por Karlos Dearma.
Salimos de
la montaña rápidamente, cualquier lugar del mundo o hasta el mismo infierno es
mejor que aquello que dejamos atrás. La Reina parece más relajada ahora.
Intento susurrarle algo a NAGA, como para romper el hielo:
-Faltaba un
poco de limpieza allí adentro hermanita, ¿No te parece?
El chiste
parece no ser del agrado de NAGA, que me mira con seriedad y desaprobación, sin
contestarme. Continúa caminando: Al diablo con ella, su campaña y su sentido
de la autoridad.
Me alegra volver a ver la luz del Sol. Vamos al campamento, el
ejército se pondrá inmediatamente en marcha hacia Napata para recuperar la
ciudad: Quisiera saber cómo hará TUTMOSIS para detener a nuestros cien mil.
101 ANKUWA Y LA REBELION DE ALEPO
Por Karlos Dearma.
Un par de
semanas después llegamos a Ankuwa. La ciudad está claramente dividida en tres
partes: Las residencias de los habitantes locales, la fortaleza que custodian
los soldados del rey de Hatti y el barrio comercial poblado por mercaderes de
toda la región; especialmente Asirios.
ARNUWANDA ha
marchado a casa de su parentela, quedamos en verle más tarde. HATTUSILLI está
abocado a la tarea de encontrar información sobre el paradero de su amigo
egipcio, ahora le acompaño al barrio de los comerciantes.
-¿Cómo
esperas obtener información por aquí? ¿Invitaras tragos a todos los mercaderes
que encontremos?
-Tal vez si,
tal vez no sea necesario, o tal vez alguien sepa algo.
-Está bien.
A falta de un mejor plan.
-¿Tienes
alguna sugerencia para hacer?
-Busquemos
una posada.
Sin chistar
decide seguirme la corriente, preguntamos a un vendedor, nos señala una
dirección dos calles más abajo. Caminamos en silencio. No es difícil encontrar
el lugar, el olor a comida nos arrastra; entramos y buscamos una mesa vacía.
Nos acomodamos y un gigante gordo viene a recibirnos, nos habla en la lengua de
los asirios, se ha confundido y le observamos en silencio, vuelve a preguntar
esta vez en heteo:
-Sois
bienvenidos a mi humilde fonda: ¿Deseáis algo para comer y beber?
-Acertaste.
Unos minutos
después regresa con una especie de guiso, pan
y una vasija de vino. El guisado no vale las monedas que gastamos en él:
Lo comemos con avidez, no es cuestión el comportarnos como príncipes en una
situación así, el hambre que llevamos es superior a los gustos finos de nuestro
paladar.
En una mesa cercana dos hombres con aspecto de feriantes se quejan en
voz alta:
-ATELES,
este es el peor guiso que he tenido la desgracia de probar entre aquí y
Fenicia, ni mis perros lo comerían. ¿Acaso quieres matarnos?
-Lo siento
su excelencia, mi esposa es una buena mujer pero una mala cocinera, puedo
ofreceros queso y frutas si os apetece.
-Olvídalo, no
te quejes y recuerda este proverbio
hebreo: dichoso del hombre que consiga una mujer buena pues vivirá el doble.
-A
propósito: No comiendo este tipo de guisos.
-Ja Ja
Ja.-ATELES también ríe con la “ocurrencia” de los parroquianos.
HATTUSILLI
llama por lo bajo al dueño de la posada.
-¿Deseáis
algo más señor?
-Sí. Pagaré la
comida de esos dos señores.
-Como su
excelencia quiera.
-No me
llames excelencia.
ATELES
regresa al fondo de la posada. Un momento después los dos mercaderes se
presentan en nuestra mesa agradeciendo la atención:
-Mi nombre
es MELIOS y él es mi socio SHIDELLES, queríamos agradeceros la gentileza. ¿Hay
algún motivo, Acaso nos hemos conocido en otra ocasión?
-No creo que
nos hayamos visto antes, mi nombre es HATTUSILLI y solo somos dos viajeros, él
es mi nieto MUWATALLIS, simplemente escuchamos que recorristeis la ruta desde
Fenicia y sentimos curiosidad. Vamos en ese sentido.
-Así es
noble hombre. Son tiempos turbulentos, eso arruina el comercio, guerra por
doquier y ahora una rebelión en Alepo, tal vez hayáis oído hablar de su rey
EA-TESHUB.
-¿Quién
podría ignorar el nombre del bribón sanguinario ese? Pero decidme: ¿Una
rebelión en su contra?
-Así es. Los
campesinos finalmente se le han rebelado. Ha gobernado tiránicamente esa región
por siete años, luego de asesinar al viejo rey; sus hombres han cometido todo
tipo de crímenes y él mismo lo ha consentido. Su gobierno de terror disuadió a
los habitantes todos estos años; aterrorizándoles se ha mantenido en el
gobierno, pero se ha pasado de la raya demasiadas veces y ahora se han decidido
a combatirle. Dicen que es un extranjero quien les manda.
-¿Un
extranjero como jefe del pueblo?-Aquí los ojos de HATTUSILLI parecen
encenderse.- ¿Sabéis algo más sobre él?
-No sabemos
su nombre, solo que es un muy buen guerrero y les ha entrenado y bien, jamás
arriesgan una batalla abierta contra EA-TESHUB y su ejército, se limitan a
hostigarle y humillarle las veces que pueden, luego vuelven a ocultarse. Pero
he sabido que EA-TESHUB no se ha cruzado de brazos: Ha conseguido los servicios
de mercenarios egipcios liderados por un noble venido a menos.
-¿Un
egipcio? Suena extraño: Está lejos de su tierra. ¿Cuál es su nombre, lo sabéis?
-Sí, es un
hombretón soberbio y cruel al que es mejor evitar, a decir verdad abandonamos
ese paraje lo más pronto que pudimos, su nombre es MENEFER.
continuará ...