125 UNA MUJER REBELDE
Por Karlos Dearma.
Acompaño a
EA-TESHUB al interior de la ciudad. Estoy rodeado por su guardia, una mezcla
rara de elamitas, acadios, cananeos y algunos compatriotas heteos; una masa
diferente a los mercenarios egipcios que custodian las almenas. Los habitantes
de la ciudad nos abren el paso con temor: Es lo que puedo leer en sus caras.
Nos dirigimos al palacio sin oposición.
La
prisionera viene con nosotros, la observo mejor: Su rostro es duro pero hermoso
y no manifiesta miedo alguno, solo insolencia. Es valiente; tal vez no le sirva
de mucho.
-Dime
EA-TESHUB: ¿Era necesario golpear a la mujer de esa manera?
-Es la líder
de un grupo de rebeldes, no es una mujer cualquiera, costó muchos hombres
capturarla. Puedo admitir que tu acción de hace un rato, defendiéndola, fue un
acto muy noble: Tienes valores que respeto. Pero por nuestro bien y el de ella
será mejor que hable, pues morirá si no lo hace. Esta rebelión me está costando
demasiado, MUWATALLIS.
-¿Qué tienes
para mí?
-Irás a mi
prisión y allí me servirás hasta que surja algo más. ¿De dónde vienes y cómo
llegaste hasta aquí?
-Vengo de
Ankuwa. En una taberna conocí a dos mercaderes de esta ruta. Ellos me contaron
de la rebelión de Alepo y supuse que podía conseguir un trabajo aquí.
-¿Y antes de
eso? ¿De dónde sacaste tu habilidad con la espada? Puedo reconocer a un buen
guerrero cuando lo veo.
-Estuve en
el ejército de TELEPINU. Lo acompañé en su campaña a Arzawa donde fui herido.
Salí de la leva luego de su muerte: El nuevo rey no me merece el mismo respeto.
-De algo de
aquello me enteré. Seguiré a mi palacio, GUREK te indicará tu nuevo destino, ya
volveremos a vernos.
EA-TESHUB se
aleja con una parte de su guardia, la ciudad parece desierta. El ambiente es
opresivo y tenso; como si fuera el terror el que domina todo el lugar.
GUREK es un
compatriota hitita. Voy con él, llevamos a la prisionera a la cárcel de
EA-TESHUB. Sigo prendido de su belleza pero no puedo obnubilarme ahora, tengo
una misión. Cambio algunas palabras con GUREK:
-¿Hace mucho
que estas aquí, GUREK?
-Un poco
menos de un año. Supongo que vine por lo mismo que tú, MUWATALLIS.
-Oro. ¿De
dónde saca tanto, EA-TESHUB?
-Dicen que
una parte viene del comercio pero creo que la mayoría le cae desde Mittani y
Asiria. El comercio ha caído mucho con la rebelión. Además las tropas de
EA-TESHUB son demasiado descontroladas.
-¿A qué te
refieres?
-A sus
vicios y a su crueldad. Les deja que abusen del pueblo y se le ha vuelto en
contra. Además sus capitanes son, a mi juicio, de lo más incompetentes, pero no
sé porque te digo todo esto: Apenas te conozco.
-No tengas
cuidado. No contaré nada de lo que me dices. Háblame de sus capitanes.
-Son un
montón de ladrones, empezando por ese al que le diste una paliza.
-¿ZIGGUR?
-Sí. Ese
llego hace poco pero antes había estado aquí. Fue al Egipto con los asirios y
regreso luego de la derrota de SALMANASAR: Menudo enemigo te has conseguido. Lo
mismo le cabe a MENEFER el jefe de los egipcios: Dicen que su faraón lo corrió
por incompetente. ¡Así que imagínate! … No me sorprende el que EA-TESHUB te
haya contratado luego de verte. Si vencemos a los rebeldes tal vez sea con
suerte. Supongo que es la suerte la que nos ha colocado aquí dentro de la
ciudad y en la prisión: Muchos de nuestros soldados han muerto a mano de los campesinos allá afuera.
-¿Qué me
puedes decir de los sublevados?
-Son gente
pobre. Un extranjero los lidera. Es todo lo que sabemos. Creo que ni siquiera
los campesinos saben su nombre: Los rebeldes capturados y torturados le llaman
así, “El extranjero”.
Observo
nuevamente a la mujer, me mira con odio. Trato de acercarme un poco, la
interrogo:
-Mi nombre
es MUWATALLIS, ¿Cómo te llamas?
-¡Vete a la
mierda!
continuará ...
Yo soy una mujer rebelde como ésta antigua hermana que vive en tu obra. Chau!!!
ResponderEliminarMe alegra que hayas encontrado la coincidencia y que te guste la historia, gracias por pasarte y comentar Egle. Besote :)
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