Seguidores del BLoG

martes, 21 de abril de 2015

SETI, EL EGIPCIO /// Capitulo 74


74    SETI, ACORRALADO POR LA SUERTE
Por Karlos Dearma.

Puedo ver el Nilo a lo lejos, serpenteando en la planicie, transcurriendo en dirección al norte. El calor nos mantiene adormecidos, lentos en nuestros movimientos, ansiando un lecho fresco. Pero no es posible descansar, necesitamos ponernos a salvo primero, tomar distancia de nuestras perseguidoras. O seremos las presas.

Envié a los soldados liberados con su capitán hacia el Oeste: Supongo que ya habrán alcanzado el río. Solo AMUN me acompaña. Puedo dominar la llanura a nuestras espaldas, no hay señales de las NAGA. Esto no me gusta, demasiado fácil.

 -Espero alcancemos el río pronto: No veo la hora de llegar a Tebas. Nos hospedaremos en casa de mi amigo AMENHOTEP.
-¿El escriba?
-El mismo, y tomaremos la cerveza de USI.
-¡Los Dioses te oigan! ¡Llegare nadando si es necesario!
-¡Ja!, estoy seguro de ello.

-Dime SETI: ¿No te parece extraño que hayamos despistado tan fácil a las NAGA?
-Sí, pero mejor no lo digas: No hay que traicionar a la suerte.

Apuramos el trote para poder llegar al río más rápido. Debemos buscar una barca que nos lleve hacia el norte. Hay algunas aldeas de pescadores en esta región, las dejamos atrás en nuestro camino a Nubia. Tal vez algún comerciante acepte unas piezas de oro de unos pasajeros ansiosos, por dejar este país.

Bajamos una barranca y pisamos la arena blanca y ardiente. El Nilo irradia frescura y mantiene su andar sereno, sin percatarse de nuestra presencia. Sin embargo hay algo en el paisaje delante de nosotros que me cambia el humor y es precisamente aquello que altera los planes de cualquiera, y no de la mejor manera: Descansando del Sol bajo un grupo de árboles, las cuatro guerreras NAGA nos cortan el paso:

-¡Vaya sorpresa SETI! Nos han alcanzado y no tienen un rostro muy amigable.
-¿Que esperabas? ¿Un grupo de bailarinas dándonos la bienvenida?
-Bueno, ¡No!. Tal vez algo más simpático que esto.

Una de las NAGA se incorpora, sonriente, confiada. El resto parece imitarla. Será mejor acortar algo de distancia para mantener un dialogo: No espero poder escapar de ellas corriendo. Tampoco negociar. Por lo menos conocer mínimamente a nuestras perseguidoras.
Tal vez en unos instantes estemos matándonos mutuamente.

-Saludos. Debo deciros que sois muy buenas rastreadoras. Su reina puede estar más que satisfecha con vosotras.
-¿Acaso tratas de endulzarnos los oídos para negociar? Porque si ese es el caso debo decirte que estas equivocado. Te llevaré con NAGA por las buenas o por las malas.
-¿Me quiere vivo? Me halaga.
-No creo que te sientas halagado cuando NAGA te ponga las manos encima.

-No estuvo tan mal la primera vez. Sera mejor acortar esta charla entonces. No es bueno estar cuatro contra uno pero estoy dispuesto a dar lucha. Deja a mi amigo partir: No es a él a quien buscas.
-Te equivocas: Tengo algo que arreglar con ese pequeño insolente. Luego de acabar contigo.
-Eso no te será fácil así que comencemos de una vez.

Distraído en la conversación no había advertido que un grupo de guerreros nos estaba cercando. Somos ahora observados por una veintena de soldados meroítas. ¿De dónde salieron? No importa: Estamos rodeados. Tengo la impresión que las NAGA también han sido sorprendidas. Uno de ellos, el que parece su jefe, se adelanta:

-Vengo por ti, SETI. Me han hablado de tus hazañas egipcio. Mi nombre es SEBIOMEKAR.
-¡Al fin te manifiestas! Debo deciros que últimamente eres difícil de hallar. No puedo decir que sea un gusto conocerte SEBIOMEKAR.
-Si quieres al egipcio ponte en la fila, nos costó mucho hallarle y nuestra reina también lo quiere.-La amazona no parece dispuesta a cederme, es una escena simpática aunque no puedo predecir hasta donde llegará esto.

-Sera mejor que te hagas a un lado, LEONA, nadie me quitará a SETI.
-¿Eso es lo que crees? ¿Quisiera saber cómo piensas lograrlo?

En lo que parece una pequeña fracción de tiempo, y luego de una señal que les hace SEBIOMEKAR, los arqueros meroítas le disparan a LEONA que cae acribillada de flechas. Las otras guerreras gritan, trato de protegerme con mi escudo. AMUN me imita. Una avalancha de guerreros meroítas nos cae encima. 

Golpeamos a algunos de ellos, caen. Ponemos nuestras espaldas con el Nilo detrás. Son demasiados. Las NAGA combaten con fiereza: No sé si será suficiente. Retrocedemos. Ahora las NAGA hacen un círculo de escudos incluyéndonos, somos aliados temporales, repartimos golpes de espada:

-Escuchen NAGA podemos unir fuerzas: ¡Debemos cubrirnos en ese bosquecillo!
-Está bien. LUNA, GACELA: ¡Vamos!
-¡PANTERA, han herido a GACELA!-Atravesada por una saeta, la joven cae sin sentido, la rodeamos cubriéndola. Está muy mal herida.  Debemos hacer algo:

-¡Alto SEBIOMEKAR! Es a mí a quien quieres. Detén a tus hombres y hablaremos.

continuará ... 



4 comentarios:

  1. Inagotable tu maginación, Carlos, tanto como ahora mi curiosidad por conocer la continuación.
    Qué extraños aliados hace a veces el destino: en un momento estás dispuesto a matar a alguien por tu vida y al segundo siguiente estás tratando de protegerle, convertidos en compañeros de fatigas. Muy interesante y ameno!!

    Un abrazo,que tengas feliz martes!!

    ResponderEliminar
  2. Gracias amiga, me alegra que te guste. Y tienes razón puede pasar: Me gustaba la idea de amigos-enemigos que se necesitan mutuamente por lo menos en esa situación limite. Abrazos, feliz semana!!!

    ResponderEliminar
  3. Las Nagas queriendo agarrar a Seti, "como lo adoran" je,je,je. Sigue la emoción y la acción en esta historia.
    Feliz martes Carlos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seti debe tener glamour je je, Sigue la acción amiga, como prometí. Abrazos.

      Eliminar