27 EL CONSEJO DE TELEPINU
Por Karlos Dearma.
Tiempos de
deshielo en Arzawa, la marcha prosigue. Los arroyos desbordados dificultan el
avance, no hay en esta tierra un río que merezca ese nombre. Mucho mejor para nosotros: Ya tenemos
suficiente con la terquedad de TELEPINU. Mi padre nos reúne en asamblea: Todos
los generales de Hatti están presentes. MURSHILLIS mi hermano, SHUBILULIUMA de
Kanesh, LABARNA de Nera, HATTILI de Landa, y ZIDANTA de Ankuwa. El ejército
está completo, 25 mil hombres en condiciones de combatir. Mi padre es el que
habla:
-Marcharemos
directamente hacia Apasa y la tomaremos. Luego nos dedicaremos a
escarmentar a los aliados de LUWIYA. Los
Ahhiyawa en primer lugar. Son guerreros fieros, quiero liquidarles.
-Tenemos
mejores guerreros en Hatti, les venceremos fácilmente.-SHUBILULIUMA interviene
con obsecuencia, su mejor cualidad.
-Si no nos
sepultan antes.-Intervengo-Hemos sabido que tienen un ejército de respeto y
saben cómo pelear en estas montañas: Mi abuelo HATTUSILI aprendió una dura
lección sobre eso.
-Paso ya
mucho tiempo de aquello. Los luvitas aprenderán lo que es pelear, les
enseñaremos, se arrepentirán de todo. Tal vez deberías haberte quedado en
Hatussas. -Mi hermano MURSHILLIS no pierde oportunidad de meter un bocado, mi
padre permanece en silencio.
-Ganas no me
faltaban, después de todo el invierno aún no ha terminado, y dudo que esta
guerra valga las vidas que gastaremos. Además
le debemos a Teshub de los vientos su festival anual. No es conveniente
alterar los designios de los dioses.
-¡Ja! Dime
¿Cuándo te importaron los dioses?
-Tienes
razón, solo estoy aquí para conocer al luvita que te hará morder el
polvo.-Entonces TELEPINU se enfurece e interviene en mi contra, como es
habitual en él:
-¡Silencio
MUWATALLIS! Me agotas con tu labia pesimista. Seguiremos adelante con esto, tú
seguirás mis órdenes. Y respetaras más a tu hermano.
-No osare
desobedecer jamás tus ordenes padre. Y con respecto a mi hermano, Muy bien. Lo
respetare, lo prometo. Como respeto a un buey, después de todo es tan bruto
como uno de ellos… Iré a revistar a mis
tropas.
Todo queda
en silencio. Adivino la rabia de mi padre y la inquina de mi hermano, por ahora
no me importa. Me alejo. Les debo algo a los hombres a mi mando aunque más no
sea mi compañía. Después de todo están aquí para pelear por mí en una guerra
que no quiero ni comprendo.
continuara ...
Jejejeje Muwatallis es respondón, me agrada, una guerra que no quiere ni comprende.
ResponderEliminarAbrazos Carlos.