32 EL HEREDERO DE TELEPINU
Por Karlos Dearma.
Los últimos
fríos del invierno aún no se han ausentado. Los siento más que antes, cuando
era más joven y soberbio. Eran otras
épocas en las cuales, con la inmensa fuerza de mis brazos, lleve la muerte a
muchos guerreros que osaron enfrentarme. Y con los cuales abrace a muchas
mujeres,… hasta hacerlas mías.
Ahora poco de todo ello queda. Soy un viejo
gastado que desperdicio su vida luchando contra sus
propios hermanos, para poder llamarse y ser llamado “TELEPINU el Gran Rey de
Hatti”. Eso poco significa hoy. La derrota me acompaña y, por mi culpa, humilla
a los míos.
Estoy
muriendo. Las curaciones y las palabras tranquilizadoras de mis médicos no
bastan. Adivino en sus rostros esquivos la gravedad del momento. He visto a
muchos antes en mi situación, con las heridas abiertas que me vulneran, y se lo
que me espera.
Solo me queda un último acto y espero representarlo bien. Uno de
mis hijos está a mi lado: MURSHILLIS. Espero la llegada de MUWATALLIS mi
sucesor. Mis generales SHUBILULIUMA, LABARNA, HATTILI, y ZIDANTA me rodean.
Pregunto a todos:
-¿Qué sucede
con MUWATALLIS? ¿Por qué no ha llegado aún?-Se hace un silencio mayor en mi
tienda, todos miran a mi hijo. Con voz grave MURSHILLIS responde:
-Mi hermano
no vendrá, ha caído en la batalla. Siento tener que darte esta noticia padre.
Es un momento triste para todos nosotros, a pesar de todo.
Vuelven a
rodearme el silencio y las miradas graves. Quiero llorar. Trato de evitarlo
pero no puedo. La tristeza también me vence. Es la peor de mis derrotas.
MUWATALLIS mi hijo, mi sangre, mi sucesor ha muerto. Nunca intente entenderlo.
¿Por qué tuvimos que terminar enfrentados?
Hubiera querido poder conciliarme
con él antes de partir. Ya no es posible. La muerte nos unirá nuevamente muy
pronto y tal vez allí podamos reconciliarnos. ¿Serán los dioses benévolos
conmigo por ello? Antes de rendirles cuentas debo hacer mi último acto. Tengo a
mis generales por testigos. Enjuago mis lágrimas y trato de pronunciar fuerte y
claro mi última voluntad.
-MURSHILLIS
tú serás mi sucesor cuando muera, serás Rey. Los jefes aquí presentes deberán
hacer juramento de fidelidad hacia ti en mi presencia. Espero que los mil
dioses de Hatti te acompañen. Yo TELEPINU, Rey por voluntad de los dioses, te saludo y bendigo hijo mío.
continuara ...
Bueno, al parecer, me da la impresión que Murshillis tuvo algo que ver con el desenlace de la batalla en la que por poco muere Muwatallis, tal vez me equivoque, no se, habrá que esperar a el próximo episodio.
ResponderEliminarMuy bueno Carlos.
Abrazos!